PRIMER PROYECTO

Realizado el primer proyecto del año.

   Desde hace años tenía en mente no volver a comprar el roscón de reyes y meterme en la cocina con la paciencia que requiere la receta y hacer mi propio roscón.

   El año 2011 no ha sido muy generoso conmigo...o si?. Verdaderamente he tenido muchos problemas de salud pero hasta ahora sigo aquí. No voy a quejarme. 

   Entre los proyectos que revolotean por mi cabeza está el seguir compartiendo con los amigos jueveros los temas propuestos. Me gustaría que las musas vuelvan a visitarme y me soplen al oído algunas ideas.

   Hace ya dos convocatorias que no he tenido ánimo para ponerme a escribir porque todos mis pensamientos estaban ocupados por una sola idea, cómo aceptar lo que más nos asusta, la falta de salud y de fuerzas para levantarte cada día de la cama y repetirte a ti misma que todo va a salir bien, que la vida sigue mientras puedas sentirla y que el valor para enfrentar los problemas sale de muy dentro de nosotros mismos.

   Los dos últimos meses los he pasado entre médicos, hospitales y un montón de pruebas. Al fin ya tengo diagnóstico, y posiblemente dentro de unos días sabré el tratamiento, mientras, tengo que ser positiva y sacar fuerzas de flaqueza para atravesar esta etapa con valentía y mucha esperanza.

   Nunca pensé que me tomaría una situación como ésta con tanta serenidad o quizá aún no me he puesto a pensar en lo que se me ha venido encima y en cualquier momento salgo de la nube que me envuelve y me lío a despotricar como una posesa.

   Cuando te encuentras mal lo único que quieres es que alguien te quite el malestar que te tiene postrada, que te hagan lo que tengan que hacerte pero que te devuelvan la energía que te falta para enfrentar cada día.

   En un primer momento la palabra cáncer bloquea pero pasados unos días y ante una serie de puertas que se van abriendo a tu paso empiezas a quitarle hierro a la cosa. 

   Esta espada de Damocles desaparecerá en unos meses y me sentiré orgullosa de mi entereza y seguiré pensando que las pequeñas cosas son las que de verdad importan y podré coger mi kajak y remar hasta el castillo de Sancti Petri y ver una maravillosa puesta de sol.

   Así que, cumplido mi primer proyecto voy en busca del siguiente y así iré día tras día, realizando cada uno de mis propósitos, buscando ideas y sueños que poner en práctica, cumpliendo deseos, en definitiva, VIVIENDO.

   

   FELIZ AÑO A TODOS.