En nombre del amor plegó sus alas, empaquetó su vida en fría cajas y abandonó sus sueños.
En nombre del amor dejó de ser sirena para poner los pies en la tierra. Miró atrás con los ojos inundados y el alma hecha pedazos pero no retrocedió, continuó paso a paso hacia adelante, con el corazón en un puño porque tenía claro que no habría retorno. Fue doloroso despedirse de los amigos, dejar los sueños no realizados y emprender un camino desconocido en el que encontraría muchos obstáculos que salvar sin más ayuda que las escasas fuerzas que quedaban en su interior herido. La responsabilidad atrapa, aprieta, condena el cuerpo y oprime el alma pero en nombre del amor se acepta y se cumple. Isa tenía todo lo que necesitaba, un trabajo, un hogar, amigos, mascotas, y sobre todo, lo más grande, la libertad y su independencia, ya todo aquello es un hermoso y a la vez triste recuerdo. Ha atravesado el océano, ha vuelto a su pequeña isla dejando atrás esas otras que una vez fueron su idealizado destino. Siente que se está volviendo loca pero resiste, minuto a minuto, todas las horas del día, todos los días. En nombre del amor dejó sus sueños y volvió para cuidar a sus padres. Hay que ser muy valiente y abnegado, hay que ser como es ella, una persona generosa y altruista.
Homenaje a mi hermana Isa que soñaba, vivía y volaba en las Islas Canarias, su pequeño paraíso terrenal.
En nombre del amor dejó de ser sirena para poner los pies en la tierra. Miró atrás con los ojos inundados y el alma hecha pedazos pero no retrocedió, continuó paso a paso hacia adelante, con el corazón en un puño porque tenía claro que no habría retorno. Fue doloroso despedirse de los amigos, dejar los sueños no realizados y emprender un camino desconocido en el que encontraría muchos obstáculos que salvar sin más ayuda que las escasas fuerzas que quedaban en su interior herido. La responsabilidad atrapa, aprieta, condena el cuerpo y oprime el alma pero en nombre del amor se acepta y se cumple. Isa tenía todo lo que necesitaba, un trabajo, un hogar, amigos, mascotas, y sobre todo, lo más grande, la libertad y su independencia, ya todo aquello es un hermoso y a la vez triste recuerdo. Ha atravesado el océano, ha vuelto a su pequeña isla dejando atrás esas otras que una vez fueron su idealizado destino. Siente que se está volviendo loca pero resiste, minuto a minuto, todas las horas del día, todos los días. En nombre del amor dejó sus sueños y volvió para cuidar a sus padres. Hay que ser muy valiente y abnegado, hay que ser como es ella, una persona generosa y altruista.
Homenaje a mi hermana Isa que soñaba, vivía y volaba en las Islas Canarias, su pequeño paraíso terrenal.
Mucho amor en : Matices el blog de Nieves.