Queridos amigos jueveros, con la imagen maravillosa del paisaje de mi Isla, concretamente de la Salina del Estanquillo, cierro el jueves de las Obsesiones.
Gracias a todos los que han participado y a los que no han podido pero que han estado con nosotros.
Gracias a todos los que han participado y a los que no han podido pero que han estado con nosotros.
Hemos podido comprobar que nadie está demasiado obsesionado y que lo que nos afecta son meras manías que vamos adquiriendo con el paso de los años. Hemos podido leer que muchos de nosotros a veces se siente un poco dominado por la pantalla del ordenador ya sea porque en ella se siente más acompañado que en la realidad o porque encuentra esos comentarios que le animan a seguir escribiendo; el reconocimiento se agradece aunque uno escriba siempre por la necesidad interior de expresar sus inquietudes.
Hemos leído sobre la opresión de los débiles, la obcecación con el ser amado, las pequeñas manías como recolocarse los atributos masculinos con demasiada frecuencia, aunque eso es muy habitual, y es una imagen que todos vemos a menudo. Afortunadamente las mujeres no llevamos los ovarios al exterior.
Hemos leído sobre el macho que se ha pasado la vida coleccionando amantes para al final verse solo y sin amor que acompañe sus últimos años, también sobre el que encuentra más atractivo en los muertos que en los vivos y decide mantener a su lado el cuerpo sin vida de su amada, y gracias a Mara Laira hemos descubierto algunos secretos del Demiurgo.
Quizá la obsesión más peligrosa es la que nos ha traído, como era de esperar, la especialista en el tema, María José Moreno, la anorexia, una maldita enfermedad que se apodera de la mente de tal forma que engaña hasta a los ojos mostrándole una imagen errónea de la realidad.
Bueno amigos creo que nadie tiene que pedir hora en el psiquiatra, de momento, así que os recomiendo que sigáis con esta terapia que nos va tan bien, la de escribir, y la próxima semana nos encontraremos en el blog de Alfredo, LA PLAZA DEL DIAMANTE, celebrando el séptimo cumpleaños del mismo, del blog no de Alfredo.
Gracias a todos, feliz domingo y feliz semana.
Un abrazo.
Leonor
Hemos leído sobre el macho que se ha pasado la vida coleccionando amantes para al final verse solo y sin amor que acompañe sus últimos años, también sobre el que encuentra más atractivo en los muertos que en los vivos y decide mantener a su lado el cuerpo sin vida de su amada, y gracias a Mara Laira hemos descubierto algunos secretos del Demiurgo.
Quizá la obsesión más peligrosa es la que nos ha traído, como era de esperar, la especialista en el tema, María José Moreno, la anorexia, una maldita enfermedad que se apodera de la mente de tal forma que engaña hasta a los ojos mostrándole una imagen errónea de la realidad.
Bueno amigos creo que nadie tiene que pedir hora en el psiquiatra, de momento, así que os recomiendo que sigáis con esta terapia que nos va tan bien, la de escribir, y la próxima semana nos encontraremos en el blog de Alfredo, LA PLAZA DEL DIAMANTE, celebrando el séptimo cumpleaños del mismo, del blog no de Alfredo.
Gracias a todos, feliz domingo y feliz semana.
Un abrazo.
Leonor
10 comentarios:
Ha sido un placer participar contigo en esta obsesión.
Gracias por conducirnos, un placer estar en tu blog de fotos. Un besote
Gracias por la conducción, fue todo menos obsesiva. Un beso
Te felicito por este jueves y este cierre. Me queda la duda si no necesitaré terapia al no haber participado y no entrar dentro de tu buen diagnóstico. Mi obsesión juevera es incurable, y aunque no pude participar con un relato, por estar en otros menesteres igual los acompañé con música,ya ves... jajaj
Besos y nos seguimos leyendos.
Ha sido un jueves estupendo, aunque voy atrasado en los relatos. Me encantaron las fotos personalizadas de los enlaces. Besos, amiga.
Gracias a ti amiga, ha sido muy interesante el tema de las obsesiones.
Un beso
Muy apropiado cierre para la que fue una excelente convocatoria. ¡Gracias Leonor!
Siento no haberte acompañado. Tenía preparado un relato antiguo para reeditarlo pero al final no tuve tiempo ni de eso, ando un poco liadilla.
Besos!!
Gracias Leonor por tu cálida recepción y tu propuesta! Un gusto acompañarte siempre. Un beso enorme.
La bendita obcecación con el ser amado.
Gracias por haber sabido pastorear tanta obsesión y gracias por tus regalos.
Un abrazo.
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