Semana 21 inspirados en la canción Entretiempo
El día había estado nublado a pesar de estar ya a las puertas del verano. Un viento del sur andaba despeinando melenas y alborotando ropas tendidas. Las golondrinas, pendientes de sus crías que comenzaban a probar sus alas, no dejaban que se aventurasen solas. De vez en cuando la veleta se movía señalando a ratos el poniente. Atardeció antes de lo que suele hacerlo en esta época y al salir de casa tuve la precaución de coger una rebequita de entretiempo por si arreciaba el viento.
Y ese tiempo es que me gusta, sentir el frío en la cara y cruzar en dirección al sol. Abrazos
ResponderEliminarEs que hasta....... de mayo ¡No te quites el sayo.
ResponderEliminarHoy salí por esta mi adorada Galicia , llegue al portal en camisa subí y puse la gabardina Muy contento ¡Tenía unas ganas de estrenarla!
Besos
André
Me encantó! Una historia breve y llena de sensaciones, donde el clima cambia y nos tenemos que adaptar a ello.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Nadie tiene más incertidumbre en entretiempos que los humanos... que si quito que si pongo, que si voy que si vengo...
ResponderEliminarUn besazo enorme.
Lindo texto, muy reflexivo, Leonor. Recibir todas esas emociones a través del entretiempo es una delicia.
ResponderEliminarAbrazo
Me gustó tu entretiempo, es mi preferido.
ResponderEliminarUn abrazo
El entretiempo llega cuando decimos: "Tengo el armario lleno de no sé qué ponerme"...
ResponderEliminarUn beso, compi. Gracias por tu cariño.
No se puede contar algo mejor, con menos palabras. Qué arte!!!
ResponderEliminarBueno es que las golodrinas se preocupen de dejarles volar entre tiempo y vientos, también es buena idea la chaquetita de entretiempo, aquí de momento es bastante gordita la chaqueta.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ambar